miércoles, 26 de noviembre de 2008

Estupidez




¿Por qué quieren a Farkas de presidente?
¿por
qué es millonario?
¿y que creen? ¿que va a regalar su plata
a todos los chilenos cuando salga electo?
¿que el dinero de su cuenta extra mega ultra vip
va a entrar en los fondos del país?

No me gusta mucho meterme en política,
pero entiendo que debe existir,
(no hay nada más iluso que la creencia de una anarquía efectiva),
y cómo debe existir,
que exista de la mejor forma posible,
y hay asuntos que más allá de la posición política,
de lo poco o mucho que se sepa del tema,
tienen que ver con el sentido común
y la representatividad que supone un sistema democrático.

Yo respeto las opiniones de todos
(en realidad trato, como todos)
y esta es la mía y espero sea tomada como eso.

No estoy de acuerdo con esta presión
de presentar a este multimillonario a la presidencia,
primero que todo,
me parece una falta de respeto y de tino
el que haya regalado dinero en la calle,
como si fuéramos un perro muerto de hambre
al que se le tira carne, pero molida,
de la que le sobra al carnicero...

Al dinero yo le tengo respeto
porque es algo que se gana con trabajo y esfuerzo,
que a la mayoría de la gente
le cuesta sacarse la chucha a diario
por un poco más del mínimo como en mi casa,
y que venga este señor,
del cual no dudo su buena intención
sino su buena gestión,
a comprar a la gente me parece humillante.

No se que se puede esperar
de una persona despilfarradora, demagoga y ostentosa;
existía la necesidad de querer marcar su voto
en las pasadas elecciones con su lápiz de oro
y no con lápiz grafito como cualquier ciudadano?
o querer cambiarle su reloj de oro rosado
a un humilde vocal de mesa que ni siquiera tenía reloj?
de donde sacaron que es un fiel representante de los chilenos?
no se ustedes, pero yo nunca he tenido un lápiz de oro en el bolsillo...
Y pa' que hablar sobre su viaje al espacio.

Que done a la teletón todo los millones que quiera,
muchas gracias en nombre de todos los que les beneficia,
pero el resto de los chilenos no necesitan de caridad,
necesitan soluciones reales de trabajo, educación, salud y transporte.
aprender a pescar, antes de recibir pescado.

Ni el candidato más levantao e' raja cometería estas torpezas,
y no por aparentar ser del pueblo,
sino por un cierto respeto que se merece la gente humilde.

Para conducir un país se necesita de varias cualidades,
aptitudes, vocación de servicio y cierta ambición de poder incluso,
pero no de dinero.
Quiero creer que los cargos públicos no están en venta.

¿Y qué propone risitos de oro?
salud gratis, educación gratis, internet gratis...
¿Es posible tanta ingenuidad?
y no hablo de él, hablo de los que creen su discurso populista
lleno de "haré esto" y sin ningún "lo haré de esta forma".

¿Les contaron ya que el viejo pascuero no existe?










.-

domingo, 16 de noviembre de 2008

La Pelu


Hace ocho años atrás las cosas eran bastante diferentes.
Aún vivía mi papá con nosotras
en uno de esos trece años en que
nunca tuvo sentido ese matrimonio.

Nunca había tenido una mascota,
y era un tema recurrente, por lo de la hija única y eso.
Cuando era más pequeña le tenía miedo a los perros y a todos los insectos,
luego cuando lo superé la excusa fue que no teníamos casa propia
y luego cuando la tuvimos mis papás habían planeado tener un hermanito para mi,
pero indistintamente uno de los dos se arrepentía y así pasaron varios años,
hasta que descartaron completamente esa posibilidad
y así llegó la "Pelusa" a la casa.

Yo le había puesto "Kuky"
era una coker cafesita,
pero mi mamá pasando por alto toda mis existencia como dueña de la perrita,
le dijo siempre Pelusa, y ganó.
Lo único que sabía yo era que a mi papá se la regaló un amigo de él

que tenía una perra coker que paría como loca y regalaban los perritos siempre.

Tenía como dos meses cuando llegó aquí, era hermosa,
me gustaba hacerla correr mostrándole su toalla y cuando llegaba se la tiraba encima,
se tiraba al suelo enredada en la toalla y la tironeaba
con los piñizquitos de dientes que tenía,
también le gustaba una pelota de goma muy dura que usó de mordedor
y agarraba las botellas de la etiqueta y corría por todo el patio con la botella en el hocico.
Me gustaba verla dormir,
una vez la dibujé mientras lo hacía,
la adoraba.

Ya iban tres meses con la Pelusa en la casa
y era increíble lo bien que hacía...
mis papás habían vuelto a hablarse,
incluso se reían juntos,
nunca los había visto así de bien,
todos los días habían motivos para reírse por algo que había hecho
o aprendido a hacer,
nada podía ser tan malo si llegabas y la veías correr.
Mi casa por primera vez parecía hogar.

Un día vomitó sangre.
Tenía sus vacunas al día, la llevaron corriendo al veterinario,
nunca me dejaron acompañarlos,
me quedaba aquí en la casa sola esperando que llegaran
diciendo que estaba todo bien,
pero desde ese día nunca volvieron con buenas noticias.
Cada día empeoraba su salud y su ánimo también,
tiritaba, vomitaba gusanos y sangre.

De apoco empezó a caerse,
fue cuando supimos que tenía distemper.
Ya no tenía fuerzas de ir al patio así que andaba con pañales,
yo esperaba un milagro todos los días,
que tuviera algún avance,
pero no.

Había que inyectarle unas cosas
y mi papá se las ponía aquí en la casa,
se volvió habitual verla tirada en su cojín
al lado del sillón con pañales y dos cateters en sus patitas.
En las noches se levantaba de su cojín y se iba a esconder
detrás de la cocina en un rincón donde apenas pasaba,
y se ponía a llorar ahí,
yo no podía ver eso,
sólo la escuchaba desde mi pieza
acompañandola en su llanto.
De la alegría del hogar paso a ser
la preocupación más grande para todos.

Un día en clases sentí su olor en la sala,
pregunté si alguien olía lo mismo,
la respuesta fue no.
Llegué a casa tipo dos de la tarde como todos los días,
abro la puerta y miro su cojincito... No estaba,
ni ella, ni sus pañales, ni sus cateters,
mi corazón por primera vez en mi corta vida
se agitaba con angustia mientras
veía bajar por las escaleras a mi mamá
conteniendo en su cara mi respuesta.

- Mamá, la Pelu?

Se apura a abrazarme
y llora en mis hombros,
como si yo fuera más fuerte que ella
por el solo hecho de no entender lo que pasaba.
Me explicaba entre sollozos que la Pelu
estaba sufriendo mucho y que no se iba a mejorar nunca
porque nació con distemper así que "la dormimos para siempre".

Me faltó el aire,
subí corriendo a mi pieza, me tiré a mi cama ahogá en llanto.
Mi mamá llegó a hacerme cariño en el pelo,
me contaba que estaba enterrada en el patio,
que mi papá la enterró y que lloró,
es la única vez que sé que mi papá ha llorado,
nisiquiera cuando murió su papá.

Bajé a ver el patio, me quedé mucho rato allí y le hablé no recuerdo qué,
seguramente me despedí o le pedí perdón por haberla dormido.
Desde ese día en un cofre guardé su pelota de goma
y una carta que le escribí ese día
y cada mes cuando se cumplía fecha de su muerte
le dejaba una flor y le volvía a leer esa carta,
dejaba allí una semana la flor y la guardaba en el baúl ya seca.
Guardé 12 flores, durante un año sin falta,
después la seguí velando solo dentro de mi.
De la nada, de ese pedazo de tierra donde está salieron lechugas,
"las lechugas de la Pelu" decía mi mamá y las aliñaba.

Habían pasado ya un par de años
cuando vino a casa el amigo de mi papá
que nos regaló a la Pelu...

- Oie Tito y la perra que te di weon?
- La Pelu? se murió a los meeeses la perrita.
- Aah y de qué oie?
- Distemper dijo el veterinario, osea la inyectamos, taba super mal.
- Aaaah si poh, es que la perra mía tiene distemper poh, la mamá de tu perra, pero es portadora cachay? no se muere pero los hijos de ella si, por eso los regalo liiigerito, si te iba a durar unos meses no la perra, venía fallá! jajajajaja

yo estaba ahí cuando dijo eso, me miraba aún riéndose.




domingo, 9 de noviembre de 2008

Reja de piel

Hay días que quisiera esconderme de mí,
pero no porque no me quiera,
sino por que no quiero cuestionarme más,
quiero callarme por dentro y estar en blanco
o en azul o en lila,
en lo que sea,
pero no en mí.
Me siento constantemente atrapada en mis emociones,
entre mi alma, mi estómago, mi útero y mi colon,
en la angustia, en lo que viene,
en vivir pensando por que aveces el sol no quema como yo quisiera,
porque las nubes no me regalan figuras cuando las miro,
y porque no me da verde el semáforo,
quiero tantas cosas
en el momento que yo quiero
que ayer me encontré pidiendo perdón a Dios
ilusamente mirando una estrella
como si estuviera su pupila allí.
No se si me oye
o ya me olvidó de tanto fallarle y no justificarme,
porsiacaso le explico y le pido igual,
como hace años cuando le escribía cartas a mi mamá
que le lanzaba por debajo de su puerta
cuando ya no me quería escuchar...
Quizás eso es todo,
sino lo digo me ahogo,
entonces digo y pido cueste lo que cueste,
me enseñé a no callarme
y me aprendí bien aprendía,
me exijo y exijo
y perdón por ser así,
pero ya me cree a mi misma...
Y cuando llego a decir eso
quiero volver a esconderme de mí
y contarme que esta vez si me fui
a vivir a la punta de un cerro
con un par de vacas.
Me consuela pensar
que a todos les debe pasar un poco,
que aveces se odian...
Y a veces terminan odiando lo que aman...
Consuelo de tontos pensar en que hay cosas peores...
Pido disculpas de antemano por lo que diré,
pero a quien engañamos?
uno vive siempre quiera o no dentro de su cuerpo por toda la vida...
Habrá algo peor pa' uno que estar mal con uno?
como mierda te salí!
siento pena por África y Nicaragua
pero no esta en mi todo el tiempo,
yo en mi si estoy,
aunque suene egoísta,
no lo es,
es solo que de nuevo me estoy cuestionando
y ven por que me quiero escapar de mi?
pa' callarme un rato en la calle
porque parezo loca gritando a todo chancho
y tirándome al suelo tapándome los oídos!...


No, mentira... eso pasa sólo en mi cabeza entre oreja y oreja,
y ahora entre este texto y tus ojos.