Dentro de una copa ha caído ron y vino,
lo más seguro es que no resulte algo bueno,
pero no podríamos decir por ello
que el ron es malo,
tampoco que lo es el vino,
simplemente
es una mala combinación,
y habrá que vaciar la copa,
copa que interrumpe diciendo:
- Basta voluntad y fe -
y especula:
Si le pidiéramos al ron
que abandone un poco de caña
y se impregne de uvas
preguntará ¿porqué no le piden al vino
que abandone uvas
y se impregne de caña?
Entonces,
frente a la sutil negativa,
le preguntaríamos al vino,
quién respondería
¿porqué no le piden al ron
que abandone caña
y se impregne de uvas?
Y darían vueltas el uno detrás del otro,
y el otro detrás del uno,
preguntándose ¿porqué yo, a ver?
... Ay, tercos por puros,
bastaba voluntad y fe...
Definitivamente,
hay que vaciarme.
De tantas vueltas que dio el vino tras el ron
y el ron tras el vino,
preguntándose porquéyoaver,
la copa tambaleó mareada
y cayó al suelo.
...
Al suelo ha caído ron y vino,
lo más seguro es que ahora
piensen que debieron haber cedido.
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